¿Qué es la libertad financiera? ¿En qué consiste? ¿Conoces la diferencia entre Inteligencia Financiera y Libertad Financiera?
Hay dos conceptos que considero imprescindibles que ocupen un lugar privilegiado en la mente de un emprendedor digital que esté pensando en dejar su trabajo y crear su propio negocio.
Estos dos conceptos son claves para iniciarse en la educación financiera, y según Raimon Samsó, autor del libro El Código del Dinero los define del siguiente modo:
Inteligencia Financiera (IF) : consiste básicamente en dejar de trabajar por dinero – dejar de vender tiempo – y crear un sistema de ingresos múltiples que trabajen para ti. En lenguaje coloquial, la Inteligencia Financiera consistiría en dejar de levantarse cada mañana para ir a trabajar en un empleo.
El concepto que más destaca de la anterior definición es: crear un sistema de ingresos múltiples. Es decir un sistema de ingresos ganados activamente, pasivamente o por inversión.
Uno de tus principales objetivos como emprendedor debería consistir en diversificar tu fuente de ingresos.
Libertad Financiera (LF): se mide con los meses que puedes seguir manteniendo tu mismo nivel de vida si dejas de trabajar. Es decir, consiste en dejar de preocuparse de dónde saldrá el próximo euro.
En este momento ya puedes preguntarte:
¿Cuál es el grado de tu libertad financiera? ¿Cuan libre eres financieramente? o ¿Cuantos meses podrías seguir manteniendo tu mismo nivel de vida si dejas de ingresar tu nómina mensual?
La fórmula de la libertad Financiera
Sin embargo, el autor nos propone complementar la Inteligencia Financiera con otro tipo de inteligencia: la Inteligencia Emocional (IE) . Desarrollar la Inteligencia Emocional implica autodominio de disciplina, confianza, aceptación del error y el rechazo, paciencia sin límites, y preferir la gratificación aplazada antes que la inmediata.
Así pues, como conclusión se obtiene la siguiente fórmula:
Libertad Financiera (LF) = Inteligencia Financiera (IF) + Inteligencia Emocional (IE)
Para conseguir ser libre financieramente, no solamente deberás desarrollar una fuente de ingresos múltiples y diversificarlos, sino también tendrás que gestionar y controlar tus emociones.
¿No crees que se debería enseñar a gestionar las emociones, o el dinero en las escuelas? ¿No deberían los planes de estudios incorporar materias relacionadas con estos conceptos? Hasta que no empecemos a educar a nuestros hijos financieramente, no los estaremos preparando para ser libres financieramente.
Si te ha gustado este artículo y quieres aprender más sobre educación financiera te recomiendo la lectura del libro El Código del Dinero, de Raimón Samsó. Puedes comprarlo en Amazon desde aquí.
